Si estas planeando una salida al parque o la playa, presta atención, te mostraremos algunas actividades al aire libre para niños, que te garantizarán una tarde de mucha diversión. No te preocupes, hay para todas las edades.
Además de pasar un buen rato, al jugar fuera de casa, los chicos adquieren y mejoran un gran número de habilidades fundamentales en su vida adulta, como la cooperación y el liderazgo.
En la actualidad, la mayoría de las actividades que realizan los niños se dan a puertas cerradas. Ver televisión, los videojuegos, o simplemente estudiar, todo esto les priva de una vida más activa y en contacto con el exterior.
Evita el sedentarismo en tus hijos y fomenta una vida más activa con la ayuda de actividades que ameriten ir fuera de casa. Aprovecha los fines de semana y sal a disfrutar del aire fresco con tus pequeños.
Beneficios de las actividades al aire libre para niños
Las actividades al aire libre para niños poseen una importancia más allá del mero hecho de tomar aire fresco. El desarrollo del ser humano es bastante completo y, durante la niñez se marcan varios hitos trascendentales para el crecimiento de cada individuo.
Los especialistas nombran al juego al aire libre como un pilar en el desarrollo intelectual, motor, emocional y social de los niños. Pero, ¿a qué se refieren con esto?, y ¿cómo puede tener tanta relevancia que un niño salga a jugar?
Algunos de los principales beneficios de que los niños realicen actividades al aire libre para esparcirse son:
- Mejora el estado físico. Jugar al aire libre permite que los chicos se ejerciten sin siquiera notarlo, evitando así el sedentarismo y la obesidad infantil.
- Incentiva la creatividad. Materiales diversos y una estructura de juego más holgada permiten que el infante estimule su creatividad e imaginación.
- Fomenta la autonomía. En el exterior las cosas están menos controladas que en casa, por lo que son los niños quienes tienen que proponer juegos y soluciones.
- Refuerza la unión familiar. El tiempo en familia en entornos abiertos se traduce a tiempo de calidad y atención plena a los niños, por lo que son momentos que siempre recordarán.
- Mejora las relaciones sociales. Al interactuar con otros niños, estos tienen la posibilidad de hablar, jugar e incluso discutir, aprendiendo así a socializar, resolver conflictos y hacer amigos.
- Previene problemas de salud. Desde la obtención de vitamina D, hasta la reducción del riesgo de padecer miopía, todo gracias al juego al aire libre.
Al llevar a tus hijos a pasear en contacto con la naturaleza les estás dando la posibilidad de descubrir el mundo que les rodea a través de los cinco sentidos.
Actividades al aire libre para jugar con los niños de acuerdo a sus edades
Puedes adaptar casi cualquier actividad a los requerimientos de tus pequeños, sin embargo, la edad es un factor que debes considerar al momento de escoger las dinámicas. Esto es gracias a que de acuerdo a la etapa en que se encuentren, los niños tendrán intereses y habilidades específicas.
Los expertos recomiendan que los niños realicen actividades al aire libre durante al menos una hora cada día.
Todos los niños pueden y deben jugar al aire libre. Si no sabes qué estilo de actividades ofrecer a tu pequeño porque es muy chico o ya está un poco más grande, presta atención a lo siguiente:
- 0 a 2 años: Durante esta edad lo mejor es que jueguen con arena, pintura, burbujas o cualquier otro elemento presente en las actividades sensoriales. Todo esto siempre bajo la supervisión de algún adulto.
- 2 a 4 años: A partir de los dos años, ya los niños tienen la fuerza suficiente para balancearse sin ayuda en columpios o tirarse por el tobogán. Además, pueden empezar a jugar con balones, raquetas, bicicletas, etc., siempre sin salirse del perímetro del parque.
- 4 años en adelante: Ya puedes combinar toda clase de juegos tradicionales o con reglas predeterminadas, como las escondidas, las traes, la papa caliente, entre otros.
5 Divertidas actividades al aire libre para niños
Bien sea por motivos de seguridad, médicos, o simplemente falta de motivación, muchos padres permiten que sus hijos pasen más tiempo que nunca en casa. Esto último dejará de ocurrir si planteas alguna de las siguientes actividades para niños al aire libre.
1. El pañuelo
Probablemente cuando chica jugaste al juego del pañuelo, y es que prácticamente forma parte del repertorio de juegos obligatorio para los chicos. Las reglas son bastante sencillas y puedes incluir a tantos chicos como desees.
¿Qué necesitas?
Para realizar esta actividad no necesitas más que un simple pañuelo.
¿Dónde se realiza?
El espacio para la actividad debe ser lo bastante amplio como para permitir que los niños corran.
¿Cómo se realiza?
- Deberás formar dos equipos con los participantes, como mínimo cuatro jugadores por equipo. Ambos equipo deberán sentarse a la misma distancia
- A continuación, deberás ponerte en medio del campo sujetando el pañuelo, y deberás decir en voz alta un número.
- Los participantes identificados con este número deberán ir corriendo en busca del pañuelo para regresar a la fila de su equipo antes de que el contrincante le pille.
- Quien lo consiga sin que el rival le toque gana, pero si toma el pañuelo y le tocan, gana el contrincante que lo ha alcanzado.
Objetivo: mejorar la velocidad y destreza.
Duración: 25 minutos.
Edad recomendada: 5 años en adelante.
2. Carrera de tres patas
¿Quieres una dinámica que implique esfuerzo físico y además les saque unas cuantas carcajadas? Las carreras de tres pies son perfectas para esto.
¿Qué necesitas?
Solo necesitarás algunos pañuelos o cinta adhesiva para atar a las parejas
¿Dónde se realiza?
Cualquier espacio amplio al aire libre funcionará perfecto para esta actividad.
¿Cómo se realiza?
- En primer lugar, divide a los participantes en parejas y pídeles que se coloquen uno al lado del otro.
- Seguidamente, ata una pierna de cada miembro de la pareja con un pañuelo.
- Finalmente, todas las parejas deben colocarse en el punto de partida y salir corriendo a la señal del silbido.
Las parejas tienen que correr hasta la línea de meta, coordinándose lo mejor posible para no perder el equilibrio. Ganarán quienes crucen la meta primero.
Objetivo: mejorar el equilibrio, la motricidad y la coordinación.
Duración: 15 minutos.
Edad recomendada: 6 años en adelante.
3. Pasa el saco
¿Tienes un encuentro familiar y quieres crear momentos inolvidables? Pues esta actividad es garantía de ello, además de unas buenas carcajadas.
¿Qué necesitas?
- Saco o bolsa grande y oscura
- Prendas de vestir
- Accesorios
- Dispositivo para reproducir música
¿Dónde se realiza?
El espacio requerido para esta actividad no necesariamente debe ser muy amplio, todo dependerá de la cantidad de participantes involucrados.
¿Cómo se realiza?
- Antes de comenzar el juego deberás tomar un montón de piezas de vestir y volcarlas en un saco. Asegúrate de escoger prendas diferentes y revolverlas bien.
- Una vez que llegue el momento de jugar, los participantes deberán formar un círculo.
- A continuación, dará inicio la música y todos deberán ir pasándose el saco.
- Cuando la música se detenga, quien tenga el saco en sus manos deberá tomar una pieza al azar y colocársela.
- La música seguirá y todos deberán continuar bailando hasta que la canción se detenga y el proceso se repita.
Ganará quien tenga menos prendas, aunque todos ganarán al tener una foto tan graciosa para el recuerdo.
Objetivo: incentivar la creatividad de los chicos
Duración: 30 minutos.
Edad recomendada: 4 años en adelante.
Si dejamos el móvil a un lado y nos enfocamos en la naturaleza, será más fácil compartir y compenetrarnos con nuestros hijos.
4. Gymkana
Se trata de una serie de pruebas organizadas y diseñadas para los niños en las que deberán cumplir varios retos para asegurar la victoria. Deberás aprovechar cualquier tipo de material que encuentres en la naturaleza, aunque también puedes llevar ciertos elementos de casa.
Es la dinámica al aire libre suprema, ya que podrás incluir cualquier otra actividad dentro de esta.
¿Qué necesitas?
- Cestas
- Sacos
- Globos
- Pelotas
¿Dónde se realiza?
El espacio requerido para esta actividad irá acorde a la cantidad de pruebas que incluyas, pero a mayor espacio, mejor.
¿Cómo se realiza?
Existen varias formas de realizar esta actividad, a través de pistas, superando pruebas o descifrando enigmas. En este caso lo más divertido será superar pruebas.
- Para comenzar, explica el juego a los participantes y establece los equipos.
- Los equipos se colocarán en un punto de partida desde el cual deberán a cumplir los retos instaurados. Puedes incluir pruebas como recolección de objetos, carreras en sacos, explotar globos, lanzamiento de pelotas, entre muchas otras opciones.
- Finalmente, el primer equipo que complete todas las actividades será el ganador.
Objetivo: incentivar la creatividad, la cooperación y la destreza en los chicos.
Duración: 20 minutos.
Edad recomendada: 4 años en adelante.
5. Oso hormiguero
Se trata de un juego cooperativo con el que todos los participantes tendrán un buen ejercicio físico. Es ideal para fiestas o reuniones a las que asistan muchos niños, ya que todos podrán participar a la vez.
Si hay más de 20 participantes es recomendable que haya dos osos hormigueros.
¿Qué necesitas?
- Churros para piscina
- Colchonetas
¿Dónde se realiza?
El espacio requerido para esta actividad debe ser bastante amplio, de tal forma que los participantes tengan un amplio espacio para escapar.
¿Cómo se realiza?
- Antes de comenzar con la actividad deberás distribuir por el terreno algunas colchonetas. Estas servirán de hormiguero o refugio para las hormigas.
- Deberás escoger a un niño como oso hormiguero, quien será el portador del churro de piscina a modo de nariz. Al terminar la primera ronda otro niño tomará la posición del oso.
- Una vez que el juego inicie las hormigas deberán correr para evitar que el oso las alcance con su nariz. Cuando el oso toque a una hormiga, esta deberá caer al suelo.
- A continuación, 3 o 4 jugadores deberán rescatar a la hormiga y llevarla al hormiguero, donde se recuperará y podrá volver al juego.
- Si el oso deja en el suelo a equis número de hormigas a la vez, este habrá ganado el juego.
Objetivo: fomentar la comunicación, la cooperación y la destreza física.
Duración: 20 minutos.
Edad recomendada: 5 años en adelante.
6. Rayuela
Un clásico en la infancia de casi cualquier niño, la rayuela, el avioncito, la pata coja, golosa o sambori. Sin importar el nombre por el que la conozcas, esta actividad es simplemente una de las más fáciles y divertidas para que los chicos jueguen afuera.
Recuerda que pese a que la luz del sol es necesaria para la síntesis de vitamina D en el cuerpo, resulta fundamental que protejas a los niños con cremas solares o gorras al momento de jugar en espacios abiertos.
¿Qué necesitas?
Solo necesitas algo de tiza, pintura o cinta de enmascarar.
¿Dónde se realiza?
Cualquier espacio funciona para jugar al avioncito, solo es necesario que el piso esté pintado con la característica forma.
¿Cómo se realiza?
- En primer lugar, deberás pintar una rayuela en el suelo mediante cuadrados con números en el interior. Se pueden ajustar la cantidad de números y su posición.
- Después de pintar la rayuela, cada niño tendrá que saltar en ella individualmente poniendo un solo pie cuando hay una casilla y ambos cuando hay dos casillas juntas.
- El niño debe situase detrás del primer número, con una piedra en la mano, y ha de lanzarla. El cuadrado en el que caiga se denomina «casa» y no se puede pisar.
- Si el niño pierde el equilibrio o la piedra se sale del cuadrado, se pierde el turno y pasa al siguiente jugador.
- Finalmente, gana el juego el primer jugador que llegue a la casilla número 10 realizando el recorrido sin caerse, tirar la piedra fuera de la caja o pisar una línea.
Objetivo: mejorar el equilibrio y la fortaleza muscular en las piernas.
Duración: 20 minutos.
Edad recomendada: 4 años en adelante.
Ahora que conoces todos los beneficios que ofrecen estas actividades, ya tienes toda la motivación necesaria para compartir al aire libre con tus pequeños. Elige cualquiera de las dinámicas que te mostramos y realízala con tus pequeños este mismo fin de semana.
No pierdas la oportunidad de ofrecer a tus hijos la cercanía e interacción con ambientes diferentes al del hogar, esto estrechará aún más esa relación de madre e hijo.